Hola amigos, pues henos aquí con
un nuevo Tenochas para no oxidarme tanto y que a su vez puedan entretenerse con
mis historias y que mejor oportunidad que estas fechas donde cualquier pretexto
es bueno para juntarse con la familia y amigos para comenzar con el cierre del
año, preparando las comidas de fin de año, las posadas (a ver si alguien me
invita a una no sean OGTes), la navidad y año nuevo, total puras cosas bonitas.
Por su puesto que esto me llevo a
preguntarme algo ¿realmente todo es bonito en la Navidad? Así que me puse a
hacer una de mis ya famosas investigaciones, ¿Y qué creen que me encontré? que
no todo es bello, ni miel sobre hojuelas, ni nieve sobre el árbol de navidad,
ni villancicos nocturnos en estas
fechas, pues han de enterarse que la NAVIDA’ también tiene su lado oscuro y no
me refiero a la rebatinga para comprar regalos y crear caos en las calles y
tiendas de la ciudad, NOOOOOOOOOO… porque he de informarles que existen muchas
historias de miedo que se desarrollan durante estas fechas y no todos salen
bien librados… buaajajajajaja.
Resulta que dentro del folklore
de países alpinos (son los países que están por los Alpes, digo por si no
sabían), durante la época victoriana existió una leyenda que trataba sobre un ente de demoníaca apariencia (y no, no es GRINCH) que castigaba a los niños
malos durante la temporada navideña, esta "cosa" se hacía llamar KRAMPUS.
Cuenta la leyenda que este “mono”
aparece desde la noche del 5 de diciembre merodeando los alrededores durante
dos largas semanas haciendo sonar sus campanas (no navideñas) y cadenas
oxidadas que usa para asustar con su presencia a los niños malcriados y mal portados.
Se describe su apariencia como una criatura parecida a un fauno, con largas
garras en sus manos, cuernos en la frente, tupido pelaje y una canasta o bolsa
donde guarda a los niños que devorará después (ay nanita!!).
Pero ustedes se preguntarán, ¿y cómo
chin!&%#”gados, se entera el tal KRAMPUS de quienes son los niños que se
portaron mal? ¿Pues qué creen? Que la persona que brinda esa información a esta
criatura es el mismísimo y bonachón Santa Clos (Santa Claus), cuya tarea es
premiar a los niños “buenos” y dejar el castigo para los malos a su “partner”
el Krampus… a verda’ esa no se la esperaban, no es tan buena onda el gordito de
la COCA-COLA.
Tradicionalmente en Austria, los
hombres jóvenes se visten como el Krampus la noche del 5 de diciembre y durante
las dos primeras semanas deambulan por las calles asustando a los niños con
cadenas oxidadas y campanas… que bonita tradición navideña jajaja.
En fin, podemos estar tranquilos
ya que este muchacho vive en Europa y no le gustan los tacos, pero podría ser
un buen cuento que ayude a los papás a mantener en regla a sus hijos traviesos,
y así las fiestas navideñas sean todo un éxito.
Amigos, después de esta historia
macabrona, solo me queda desearles felices fiestas y que tengan un excelente
cierre de año.
Aquí se despide el Tenocha Mayor,
El Georgealf.
Besos a los perros y abrazos a
los niños.
PD. No sean gachos y no vaya a
asustar a sus hijos (bueno solo un poquito jejeje)
PD2. Recuerden que trabajo que no
acaba en pachanga y pachanga que no acaba en la cama son dos actos fallidos.
PD3. Abusados con las pachangas que acaban en la
cama en estas fechas porque después en septiembre llegan muchas sorpresas.